Sobre el dinero, la religión y el sentido de la vida

En esta entrada resulté mezclando el hecho de que ya me llegó la edad de ganar dinero en serio, con el sentido de la vida, y la religión, fenómeno que, desde mi ateo punto de vista, me llama mucho la atención. Hablo sobre fantasías, en el sentido de que haría si me gano el baloto o un súper-baloto en EUA, y como a muchas personas el tener sus necesidades materiales cubiertas le restan sentido a la vida. Después de mis 30s, cuando tuve que superar una crisis existencial muy tenaz y después la muerte de mi papá, mi vida ahora en mis 40s tiene mucho sentido, pues siempre tendré el reto de aprender cosas nuevas, así mis fantasías materiales lleguen a cristalizarse totalmente. Uno de los tantos retos intelectuales que tengo es crear una filosofía-religionoide compatible con la ciencia, sobre lo cual al menos haré un libro, cuando tenga unos 50 o 60 años, edad en la cual el desarrollo de las estructuras religiosas del cerebro se hace sentir.

Mi tiempo es muy corto como para desperdiciarlo en actividades y tragas inútiles

En esta entrada resulto contando como se dieron las condiciones neurobiológicas para que una Ucraniana me tumbara 1.5 millones de pesos. Esto me hizo poner las barbas en remojo, recortar gastos como sea y pienso ampliar mi portafolio de servicios. Y dado que mi tiempo cuesta, conecto lo de recortar gastos con el ser más eficiente y lucrativo en mis actividades, que además de los chicharrones que no faltan, giran alrededor de la asimilación de información de cualquier fuente y convertirlas en publicaciones. Hago un pequeño relato de las series que me estoy viendo últimamente y que obviamente son insumos para mis escritos.