En este artículo relaciono el
terrorismo con la necesidad de adoptar políticas de centro para superar la
guerra fría mental que todavía se siente en nuestros países. Una de los
requisititos para que una democracia funcione es que la gente esté bien educada
para que pueda votar a consciencia. Pero además de eso, la educación hace que
la gente desarrolle más las partes racionales de sus cerebros para no ser
víctima de pasiones muy peligrosas como el fanatismo religioso, que actualmente
tiene en jaque a occidente, por parte de la amenaza mundial que supone el terrorismo
yidahista, especialmente por parte del Estado Islámico (ISIS). Me declaro como
una persona de centro derecha, Uribista, adepto al partido colombiano centro
democrático, pero dado que fui educado por 18 años en la Universidad del Valle
(claustro público que se encuentra entre el top 5 de las universidades
colombianas) en Cali, soy muy bueno interactuando con izquierdocitos, pues me
gusta la charla pesada. Pero de unos años para acá me he puesto el reto de
aprender a hablar banalidades con gente derechocita con la cual me identifico más
socio-económicamente hablando. Pero a mí la charla light todavía se me
dificulta pues todavía tengo cierto retraso mental en cuanto a inteligencia
social-emocional se refiere. Y al final concluyo que en el fondo lo importante
es conocer a cada persona y no prejuzgar simplemente por posturas políticas y
de otra índole que al final son un gradiente y son aceptables, siempre y cuando
no se vayan a los extremos.
martes, marzo 22, 2016
Política, Terrorismo y Relaciones Públicas
Etiquetas:
Álvaro Uribe,
Bruselas,
Donald Trump,
ONT-FARC,
paramilitares,
Partido Centro Democrático,
Política,
principio de dorado término medio,
Relaciones Públicas,
tendencias de centro,
Terrorismo,
Uribismo
Suscribirse a:
Entradas (Atom)